El proyecto hace referencia a dos grandes grupos de beneficiarios:
- Los alumnos vulnerables en sí, ya que el enfoque principal se centra en la metodología, en las estrategias de enseñanza y en las técnicas para ayudarlos.
- Los educadores y formadores de adultos que trabajan con grupos sociales vulnerables (adultos jóvenes no cualificados, personas ciegas o con visión defectuosa, reclusos, migrantes o personas desplazadas, ciudadanos mayores inactivos o sedentarios, etc.) en centros de asistencia social, escuelas de segunda oportunidad o en instituciones de enseñanza correctiva.
Impactos específicos en todas las personas:
Los alumnos se beneficiarán de métodos que tienen en cuenta el valor de las relaciones interpersonales y sociales al mismo tiempo que los formadores mejoran sus estrategias educativas y su capacidad de innovar y de debatir abiertamente y comparten sus preocupaciones en cuestiones de enseñanza.
Impactos específicos en los alumnos con menos privilegios:
Se reconoce a los alumnos mayores, migrantes, reclusos y discapacitados como ciudadanos preparados que comparten experiencias con otros grupos meta en varios contextos europeos, lo que prueba la relatividad de los diferentes puntos de vista.
Impactos específicos en el personal y en las organizaciones:
Se logra reducir la sensación de pertenencia a un grupo extraño al interpretar un papel importante en la asociación mediante la participación de los formadores involucrados en el proyecto.
Las organizaciones crean prácticas pedagógicas innovadoras relacionadas con la diversión y con juegos que a menudo se rechazan por considerarse que no son lo suficientemente serias o que constituyen un riesgo para la credibilidad de la institución.
